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¿Qué es el Home Office?Hace años era impensable que las empresas autorizaran a sus empleados trabajar en otro lugar distinto a la oficina, no les proporcionaban computadoras por la desconfianza de saber si realmente se aprovechaba el tiempo en las tareas asignadas o las ocupaban para divertirse, sin embargo, hoy en día las compañías han notado que ser flexibles en los horarios y espacios de trabajo les brinda múltiples beneficios, tales como: más productividad de sus colaboradores, economía en recursos e instalaciones, un mejor ambiente laboral.
El llamado home office o empleo desde casa es una de las consecuencias de esta apertura organizacional. Una de sus principales ventajas es que permite a los trabajadores estar comunicados en cualquier lugar con acceso a internet. Este esquema de trabajo parece muy atractivo en un inicio, pues se tiene la comodidad que ofrece el hogar, evitando horas perdidas en el tránsito, estrés y otros gastos como la alimentación.
No obstante, hacer home office no es tan sencillo y no es para todos. Cuando el puesto lo permite, por ejemplo, en actividades de redactores, diseñadores, contadores, personal de soporte técnico, profesores de cursos en línea, entre otros, no asistir a la oficina es sinónimo de conveniencia y cifras interesantes para las empresas y sus colaboradores:
Para que el trabajo en casa sea productivo y exitoso debe haber ciertas condiciones favorables como: acceso a internet (en casa, restaurantes, cibercafés, etcétera), contar con equipo de cómputo (laptops, tablets o smartphones), acceso a la red de la empresa de manera remota sin riesgos de intrusión externa, correo electrónico, herramienta de colaboración y acceso remoto a aplicaciones de la empresa en caso de tenerlas.
Además, para garantizar el éxito de este esquema se deben seguir las siguientes recomendaciones: iniciar con los empleados más responsables, establecer un programa de administración por objetivos, llevar una cultura de seguimiento por parte de los jefes y el compromiso de los empleados de estar localizables en los horarios acordados.
Esta modalidad a distancia parece una fortuna –y es posible que lo sea cuando palabras como disciplina forman parte de tu día a día–, sin embargo, y más siendo primerizos en el tema, también es muy fácil caer en distracciones.
Planear tu día y tener horarios destinados al trabajo es lo más importante para ser productivos. Definir lo que harás durante el día te ayudará a concentrarte y avanzar en el cumplimiento de los objetivos. Dentro de casa lo mejor es tener un lugar específico para trabajar donde se cuente con las herramientas necesarias para no perder tiempo. Además, es necesario establecer horarios y reglas pues un desorden en tus horarios podría traerte más desventajas que beneficios a largo plazo.
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