1º- Vacía tu cerebro: escribe en una libreta todos los pensamientos que te vienen a la mente para no abrumar tu cerebro y llévala siempre contigo para cualquier actuar en cualquier momento. Preocuparse es una pérdida de tiempo.
2º- Organiza tus pensamientos: Has una lista de prioridades de lo que debes hacer y luego pon una fecha a cada cosa que tienes que cumplir. Para más eficacia, prográmalo en tu agenda electrónica y con alarma en el caso de algo muy importante.
3º- Enfócate en tu tarea del momento sin preocuparte del resto. Tener dos compromisos distintos en la mente lleva al estrés y al fracaso. La creatividad aparece cuando le dejas espacio. Piensa que tu energía sigue a tu pensamiento.
Axelle Clement