Vida laboral

En la época actual podemos escuchar mucho el término freelance en frases como “soy freelance, trabajo de freelance, me dedico al freelance”, pero en realidad de qué nos están hablando, muchas personas podrían decirnos “eso no es trabajar” porque aún se tiene esa idea de que necesitas estar en una oficina (que no sea tu casa) y que además le rindas cuentas a un jefe/patrón.

En nuestra anterior entrada platicabamos sobre las habilidades específicas que el mercado laboral comienza a solicitar con mayor frecuencia en sus candidatos. Hicimos mención sobre la importancia del verdadero trabajo en equipo, la responsabilidad y el sentido de pertenencia.

Este tipo de síndromes comienzan a causar muchos comentarios, hay quienes creen que es una exageración y que, desde luego, no existe, hasta los que creen que es tan real que logra incapacitar a las personas laboralmente.

Separar lo personal de lo profesional era la idea que se tenía anteriormente, hoy, muchas personas consideran que puede ser una buena idea, claro está que a muchas no les funciona pero a otras tantas sí.

¿Qué difícil suena el título de esta nueva entrada? La mayoría nos hemos visto “obligados” a decir sí a muchas cosas, mismas que después nos causan incomodidad e incluso dificultades para poder decir no en una segunda vez.

Todo lo que es tóxico está de moda, muchos se ríen y creen que nada más es un meme o justamente algo pasajero, la moda de decir que todo lo que nos rodea es tóxico, pero hay algo importante en todo esto, la observación y la realidad.

Mucho se ha hablado de ser un líder, de hecho, anteriormente hemos definido qué es ser un jefe y un líder, las diferencias que arroja cada uno y la importancia, también comentamos que en esta actualidad es más eficaz contar con un líder de proyecto, pero un líder consciente.

¿Te has preguntado cómo aumentar el desempeño de las personas que trabajan contigo o de aquellos que están haciendo labores en equipo? Lo más seguro es que sí, lo más seguro es que deseas saber cuál es esa opción para que todo se haga como lo esperado y bien, pero al mismo tiempo que estén interesados quienes conforman el área o el equipo.

El trabajo en equipo puede ser un dolor de cabeza para muchos, lo hemos experimentado desde que éramos estudiantes y nos dejaban tareas o exposiciones con otras personas, que no siempre eran nuestros amigos y con los que podíamos trabajar muy bien, aunque, debemos confesar que aunque eran nuestros cercanos siempre salía algo mal.