Como lo hemos comentado en artículos anteriores, la entrevista es uno de los pasos más difíciles a los que un prospecto se puede se puede someter. Muchas veces por nervios, inexperiencia o rigidez de la entrevista se puede fracasar.
Por esta razón te compartimos 4 consejos para que destaques en tu próxima entrevista de trabajo.
- Conócete a ti mismo. ¿Cómo puedes demostrar que eres el candidato que están buscando si no te conoces? Para hacerlo necesita saber cuáles son tus virtudes, defectos, capacidades y cualidades para que en la entrevista puedas saber cómo describirlos. También puedes preguntar a tus conocidos, amigos y familiares que te ayuden a reconocer las habilidades para obtener una opinión más objetiva sobre tus habilidades y así aprovecharlas de mejor manera.
- Descubre cómo venderte. ¿Quieres dar una buena impresión? Recuerda que no hay segundas impresiones, por esto, debes mostrar tranquilidad, confianza y cercanía con el entrevistador, de esta manera podrás crear un vínculo de empatía. Otra razón para aprender a venderte es demostrar las razones para que la empresa reconozca por qué es necesario que estés en su equipo. Sé humilde y evita comentarios con ego y centrate en los pequeños detalles que visualizaste en el punto anterior para destacar de entre los demás.
- Demuestra tu entusiasmo. Otras de las cualidades que valoran los entrevistados es la buena actitud y es importante destacar entre los demás candidatos. La recomendación es que te muestres feliz y con ganas, evita entrar a la reunión con miedo o negatividad porque de esta manera es probable que no te selecciones. Busca el equilibro medio de estas actitudes, tampoco es necesario entrar con excesiva confianza y tratar al entrevistador como un amigo, siempre busca ser profesional con tu imagen personal.
- Amor a primera vista. Como lo mencionamos en el segundo punto, la primera impresión es la más importante, por esto es importante que lo demuestres en la entrevista, desde llegar a tiempo (destacas que eres una persona puntual) y hasta cuidar tu vestuario. Parece obvio, sin embargo no te olvides de saludar de manera cordial al reclutador pero no lo confundas con un amigo, sé respetuoso con un apretón de manos o con un saludo desde lejos por cuestiones de la contingencia.
Es momento de brillar, demuestra qué sabes hacer y cómo puedes hacerlo para destacar la empresa. Debes estar atento a los gestos del entrevistador y saber cuándo vas bien o cuándo será necesario cambiar de estrategia.