Hoy en día la comunicación es muy importante tanto en la vida laboral, como en la personal. Pero no siempre se puede entablar un buen canal de comunicación para poder expresarse, por esta razón te compartimos estos consejos para una comunicación asertiva.
- Escucha y evalúa el contexto. La clave de una buena comunicación es lograr empática y lo primero es que hay que comprender a la otra persona y antes de dar o emitir algún criterio, es recomendable tener en cuenta el entorno y la cultura de las personas que están escuchando nuestro mensaje.
- Utiliza lenguaje sencillo en primera persona, con palabras positivas. ¿Por qué es esto importante? De esta manera transmitiremos confianza y evitaremos la negación para generar emociones que nos ayuden a ser más productivos y eficientes en el trabajo. Es un tip que pueden implementar tanto directivos como colaboradores en la hora de una junta, presentación de resultados o propuestas con clientes.
- Transmite confianza, sé coherente y respeta a los demás. Como lo comentamos en el punto anterior, establecer una relación entre lo que se dice y hace crea confianza, además de evitar discusiones. Ser sincero es una meta principal para tener una comunicación asertiva.
- El tono y el lenguaje no verbal también son parte del mensaje. Las gesticulaciones, la postura y el tono de la voz también comunican. Saber emplear las expresiones corporales adecuadamente, generan confianza y aumentan la comprensión, así como determinar si se generan emociones positivas o negativas.
- Emite un mensaje neutro. Es importante que cuando hablamos sobre la comunicación asertiva en el trabajo, el tono que se empleó para dar mensajes sea neutro, significa que los juicios de las personas son diferentes, la recomendación es dar ideas argumentadas con criterio y evitar prejuicios y reconocer las diferencias entre los diferentes colaboradores.
- Pide retroalimentación. La mejor manera de asegurarse que se emitió el mensaje correctamente y se entendió con éxito es pedir retroalimentación, desde preguntas: “¿Cuál es tu opinión sobre el tema?, ¿Quedó alguna duda sobre lo que hablamos?, ¿Cuáles son tus conclusiones?” de esta manera podremos tener un parámetro de si se entendió o no nuestro mensaje.
Reconocer que hay diferentes opiniones dentro de un ambiente laboral, nos ayuda a poder dialogar posibles soluciones a diferentes problemas.